Un diente roto puede ser una experiencia angustiante y dolorosa. Este incidente no solo afecta la apariencia estética de tu sonrisa, sino que también puede tener un impacto significativo en tu salud bucal y bienestar general. Ya sea debido a un accidente, una lesión deportiva, el consumo de alimentos duros o simplemente el desgaste natural con el tiempo, un diente roto requiere atención inmediata para prevenir complicaciones futuras y restaurar la función y estética de tu sonrisa.
¿Por qué se puede romper un diente?
Puede haber muchas razones, de hecho nuestros pacientes tienen historias tan peculiares como sorprendentes que las hemos clasificado, a continuación te dejamos un listado con las más frecuentes.
Trauma físico: puede que hayas tenido un golpe directo en la boca debido a un accidente de coche o en casa, a una caída o golpe durante la práctica de algún deporte.
Masticar alimentos duros: Las nueces, el hielo o los caramelos pueden ser algunos alimentos que pueden romper nuestros dientes porque ejercen una presión excesiva y provocar la ruptura.
Bruxismo: El bruxismo es una afección en la que una persona rechina, aprieta o cruje los dientes, se puede debilitar el esmalte con el tiempo y, también, puede aumentar el riesgo de fracturas en las piezas dentales.
Caries dental: Las caries no tratadas pueden debilitar la estructura del diente, haciéndolo más propenso a romperse, especialmente si se somete a presión adicional al masticar.
¿Cómo se puede reparar un diente roto?
Antes de comenzar con cualquier tratamiento el equipo médico de nuestra clínica te hará una valoración de la situación, a continuación te ofrecerá un presupuesto y una hoja de ruta con la que podrás hacerte una idea del alcance, la urgencia y los pasos que tenemos que dar para garantizar la solución a tu problema.
Obturación dental: Si la fractura es pequeña y sólo afecta a la superficie del diente es posible que se pueda reparar con un empaste dental. Nuestro odontólogo eliminará cualquier resto de tejido dental dañado y rellenerá la cavidad con un material de empaste, dando la forma y la función del diente.
Corona Dental: Para fracturas más extensas o si hay una pérdida significativa de estructura dental, la solución es colocar una corona dental. Esta cubierta protectora se coloca sobre el diente comprometido para restaurar su forma, tamaño y fuerza.
Tratamiento de conducto: Este procedimiento implica la eliminación del tejido dañado y la desinfección del conducto radicular antes de sellarlo y restaurar el diente con una corona dental para prevenir infecciones futuras.
Extracción Dental: En casos extremos donde el diente está demasiado dañado para ser reparado, puede ser necesario extraerlo. Aunque esta opción es el último recurso, ya que si podemos mantener tu pieza dental, lo vamos a hacer. Una vez extraído, se pueden explorar opciones de reemplazo, como implantes dentales, puentes o dentaduras postizas, para restaurar la función y estética de tu sonrisa.
En la Clínicia Dental Fonseca Vega sabemos que un diente roto puede ser una experiencia estresante, pero gracias a nuestra experiencia y la tecnología que albergamos en nuestra clínica, es posible restaurar la salud y belleza de tu sonrisa de una forma fácil, cómoda y segura. .
Si experimentas una fractura dental, no dudes en contactar con nosotros de inmediato para evaluar el daño y determinar la mejor solución para ti. Recuerda que la prevención es clave, así que mantén una buena higiene bucal, evita morder objetos duros y programa revisiones regulares con tu dentista para mantener tu sonrisa en óptimas condiciones.
Pídenos cita sin compromiso para que nuestro equipo valore tu situación y te proponga una solución adecuada y personalizada. Síguenos también en nuestras redes sociales dónde te ofrecemos información de interés para el cuidado y salud de tu sonrisa.
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